EL BOULEVARD SE TRANSFORMA EN MISANTLA.
Decía mi padre, en paz descanse, que el México que le tocó vivir en la primera mitad del siglo XX, había cambiado y mucho, ello se debía en gran parte al avance del país, tenía mucha razón.
Lo anterior viene a cuento por la rápida transformación de Misantla, a través de los años, insertándose en la espiral del progreso, avanzando, cierto con una población diferente en cuanto a número pero en esencia, luchadora, con aspiraciones que día a día busca superación y sobrevivencia, esa es nuestra gente, que trasciende, algo legítimamente válido.
A nuestro recuerdo viene como a cambiado el ahora moderno boulevard, en aquellos tiempos, simplemente la carretera que conducía a la ciudad de Martínez de la Torre, bordeada de enormes fincas de café en su mayoría, donde los chamacos de la época “ pajareabamos”, o simplemente hacer “pico de gallo” con las naranjas que en ese tiempo abundaban, lo hacíamos con chiltepín reventado, los ruidos que ahora escuchamos totalmente diferentes a aquel entonces, el canto de los gallos que nos avisaban del amanecer, el ladrar de los perros a la lejanía ahora oímos ruidos de motocicletas, sierras cortando madera, de autos cuyos conductores se dirigen presurosos a sus labores diarias, de cortinas abrir o cerrar de prósperos negocios asentados en dicho lugar etc. los ruidos son parte de una época, ya no escuchamos la música con dedicatorias de nuestro amigo Lencho Piteros, en Plan de la Vieja, el silencio matinal y nocturno donde prevalecía el canto de la chicharras y muchas aves: calandrias, primaveras y demás, el juego infantil de muchos amigos que acudían a sus casas a determinada hora cuando “pardeaba” y llegaba la noche con aquella oscuridad que permitía ver con los candiles alimentados de petróleo, días que permanecen en nuestros recuerdos.
Así lucía el Parque Morelos en Misantla y la calle 5 de mayo.
Todo ello ha cambiado, es parte de la modernidad y que dejamos en estas líneas para que nuestras actuales generaciones lo valoren.
Es claro que el boulevard ha cambiado, Misantla también, conservemos lo hermoso, sus tradiciones y costumbres, vivamos plenamente la modernidad.
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